Después de proclamarse como campeón en la Copa de campeones de Asia con su equipo Seongnam, el futbolista colombiano, Mauricio Molina manifestó al diario el ‘Colombiano’ qué es un sueño cumplido el cual había deseado desde hace mucho tiempo y aunque afirmó que su futuro sigue en Corea, anhela finalizar su carrera con el DIM.
"Es una alegría demasiado grande y de cierta manera un desahogo, porque ya era justo ganar algo por fuera del país” comenta Molina que había pasado por Brasil, México, Emiratos Árabes, Argentina, Serbia y Paraguay, sin lograr títulos.
Con el aliciente de poder estar presente en el Mundial de clubes, que se cumplirá en Abu Dabi este diciembre, donde se enfrentará, en cuartos de final, al ganador del partido preliminar entre el Al Wahda, campeón local, y el Hekari United de Papúa Nueva Guinea, ‘Mao’ confía en acceder esa fase para chocar contra el Inter de Milán en semifinales.
Aunque se siente muy amañado en Seongnam, ciudad de la provincia de Gyeonggi, ubicada a unos 20 minutos de la capital Seúl, dice que le resulta extraño disputar finales sin el estadio lleno, curiosamente su equipo es el que más títulos tiene pero muy poca afición.
Molina espera jugar otras dos temporadas en el conjunto del lejano oriente, "Acá el salario es sagrado, son de un excesivo cumplimiento. Muchas veces hasta se adelantan diez días en el pago. El dueño es muy adinerado, y tiene varias multinacionales". Así ¡quien no se amaña, comentó el jugador.
Con la comida no sufre, pues tiene varias opciones de menú internacional, y cuándo viaja a Colombia llena su maleta con alimentos típicos, obviamente los frijoles no pueden faltar, con respecto a la crisis entre las Coreas, el volante dice que en la provincia que está no se sienten los vientos de Guerra.
Finalmente ‘Mao’ de treinta años asegura que su retiro todavía está lejano pero tiene claro que su carrera futbolística la quiere culminar con el Independiente Medellín.
"Es una alegría demasiado grande y de cierta manera un desahogo, porque ya era justo ganar algo por fuera del país” comenta Molina que había pasado por Brasil, México, Emiratos Árabes, Argentina, Serbia y Paraguay, sin lograr títulos.
Con el aliciente de poder estar presente en el Mundial de clubes, que se cumplirá en Abu Dabi este diciembre, donde se enfrentará, en cuartos de final, al ganador del partido preliminar entre el Al Wahda, campeón local, y el Hekari United de Papúa Nueva Guinea, ‘Mao’ confía en acceder esa fase para chocar contra el Inter de Milán en semifinales.
Aunque se siente muy amañado en Seongnam, ciudad de la provincia de Gyeonggi, ubicada a unos 20 minutos de la capital Seúl, dice que le resulta extraño disputar finales sin el estadio lleno, curiosamente su equipo es el que más títulos tiene pero muy poca afición.
Molina espera jugar otras dos temporadas en el conjunto del lejano oriente, "Acá el salario es sagrado, son de un excesivo cumplimiento. Muchas veces hasta se adelantan diez días en el pago. El dueño es muy adinerado, y tiene varias multinacionales". Así ¡quien no se amaña, comentó el jugador.
Con la comida no sufre, pues tiene varias opciones de menú internacional, y cuándo viaja a Colombia llena su maleta con alimentos típicos, obviamente los frijoles no pueden faltar, con respecto a la crisis entre las Coreas, el volante dice que en la provincia que está no se sienten los vientos de Guerra.
Finalmente ‘Mao’ de treinta años asegura que su retiro todavía está lejano pero tiene claro que su carrera futbolística la quiere culminar con el Independiente Medellín.
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